viernes, 18 de marzo de 2011

Reflexiones y cuadro de competencias

Tras la puesta en común de las competencias establecidas por los compañeros como las relacionadas con el ámbito de la orientación. En el aula surgieron aspectos dispares en cuanto a dichas funciones y qué elementos debemos tener en cuenta a la hora de desempeñar la labor de Orientador/a. 


Uno de los elementos a tener en cuenta es la observación, planteándose la siguiente cuestión:
¿La observación puede ser una medida eficaz para realizar la orientación, es decir, observar para poder realizar un diagnóstico y posteriormente la orientación adecuada?

Considero que la observación es un elemento fundamental, pero no puede ser la única herramienta o la más importante que posea el Orientador/a; tenemos que tener presente que existen dos tipos de observación:
  • Observación natural, cualitativa, no científica; una observación más subjetiva
  • Observación científica, sistemática; una observación más objetiva
Otro de los puntos en lo que se hizo más hincapié fue en todos los aspectos relacionados con la participación y asesoramiento de las familias, ya que es un elemento fundamental y de gran relevancia en la vida de los niños y su papel es de vital importancia para que la orientación se desarrolle favorablemente.

Una vez tenido en cuenta estas consideraciones previas realizamos un cuadro donde establecemos las competencias que creemos cada uno de nosotros más importantes para desempeñar adecuadamente la función de Orientador/a; las que yo he escogido son las siguientes:

Competencia
Realidad
Meta
1. Mostrar una conducta profesional ética
7
9
2. Habilidad para motivar
5
7
3. Capacidad de diálogo
7
10
4. Ser capaz de facilitar el aprendizaje
5
8
5. Apreciar las diferencias individuales y facilitar la interacción con todos los estudiantes
6
8
6. Tener la habilidad para conjugar acciones, tareas e implementar evaluaciones en la elaboración de diseños de proyectos
5
7
7. Mayor asesoramiento y fomento de la participación familiar
5
8


Para poder realizar el cuadro, previamente teníamos que corresponder a las cuestiones que planteo a continuación, que nos servirán de guía para poder escoger las competencias más adecuadas.

Las preguntas son las siguientes:

  1. ¿Para qué me interesa conseguir esa competencia?


- Cada una de las competencias escogidas considero que tienen una gran relevancia y la consecución de cada una de ellas me ayudará a desempeñar la función de Orientadora de una forma más eficaz y por tanto será de gran utilidad para las personas con las que voy a tratar, por lo que me interesa alcanzarlas en la medida de lo posible y las expectativas frente a ello son altas, lo que motivará mi afán de superación.

  2. ¿De qué recursos disponéis para alcanzarla?

- Antes de desempeñar el papel del Orientador, debemos adquirir unos conocimientos básicos sobre su función, las características y recursos que pueden utilizar el mismo; contenido que iremos adquiriendo a lo largo del desarrollo de esta materia.

Una vez que hayamos interiorizado el contenido necesario y adoptemos el papel de Orientador, debemos contar tanto con el apoyo del centro como el de los familiares, así cómo poder acceder a los recursos necesarios ( materiales, aulas, horario, número de alumnos....) para poder desempeñar nuestra función correctamente. Del mismo modo someternos a una formación continua para la mejora de nuestras habilidades.

  3. ¿Qué obstáculos os la dificultan?

- A día de hoy la escasa preparación al respecto sería el elemento que más destacaría como el mayor impedimento para poder ejercer esta profesión.

Aun así, considero que los obstáculos más importantes con los que me encontraría para poder alcanzar dichas competencias sería la falta de tiempo, debido al número de alumnos y la demanda que existe; además en pocas ocasiones se le da la importancia que merece el Orientador, ya que en la mayoría de los casos se acude al mismo por consejo de otras personas.

Otros obstáculos de importancia serían los medios que ofrece el centro, así cómo la organización en el mismo. Tenemos que conocer las estrategias adecuadas para poder utilizarlas en función de las características de las personas a tratar y la participación de las familias.

  4. ¿Qué podemos hacer para minimizar los obstáculos y por tanto conseguir la meta?

- Para poder minimizar los diversos obstáculos con los que nos encontraremos, como los que se han nombrado con anterioridad, debemos intentar desempeñar nuestra función en la medida de lo posible, al margen de las dificultades que se puedan presentar, preocuparnos por seguir formándonos continuamente para mejorar y por tanto trabajar de una manera más competente; centrarnos en la meta que queremos alcanzar y luchar por ella, sin decaer en la desmotivación e intentar tener una relación adecuada con los familiares para que la intervención sea lo más fructífera posible.

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